Nadiyka Gerbish | Leer El santo evangelio según San Lucas 17:5-10
El otro día encontré pulgones en nuestra planta de dracaena. Mientras lavaba sus hojas y las rociaba con una solución química especial, pensé en cómo algunas especies, algunos cultivos —y algunas personas también, como los discípulos— requieren un cuidado especial. Ellos le piden desesperadamente a Jesús que les dé más...
Querido Jesús, que podamos seguirte por el camino que preparaste para nosotros, sin perder nunca la paz que viene de confiar en tu santa voluntad. Amén.
Lamentaciones comienza con una descripción de la difícil situación del pueblo de Judá, el reino del sur. El pueblo ha sido llevado al exilio como parte del juicio de Dios por su idolatría. El salmista lucha por cantar los cánticos del Señor. De hecho, quienes conquistaron Jerusalén los han obligado a cantar para su diversión, por lo que la alegría se ha esfumado. El salmista ora para que un día Dios pague a los invasores. En la segunda Epístola a Timoteo, Pablo alaba a Dios por la fe de Timoteo y por el legado de fe que le llega a través de su familia. Lo exhorta a predicar con valentía y sin vacilación el evangelio de Cristo. En la lectura del Evangelio, Jesús desafía a los discípulos a mostrar una mayor fe y a comprender que todos somos siervos del reino de Dios.
• Lea Lamentaciones 1:1-6 y 3:19-26. ¿Dónde usted encuentra esperanza en medio del dolor y el sufrimiento?
• Lea el Salmo 137. ¿Cómo usted recuerda sus tradiciones espirituales y lugares sagrados? ¿Cómo busca la obra de Dios en circunstancias nuevas y desafiantes?
• Lea 2ª a Timoteo 1:1-14. ¿Qué prácticas espirituales le ayudan a cuidar «el don que Dios le dio»?
• Lea Lucas 17:5-10. ¿Cómo una actitud de servicio cíclico a y con toda la creación podría transformar o fortalecer su fe?
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